La activista y jugadora de élite es la invitada del XVI Torneo Internacional de Ajedrez.
El XVI Torneo Internacional de Ajedrez de Alcubierre, que se celebrará los días 22 y 23 de julio en la localidad monegrina, contará con la presencia de Sara Khadem, ajedrecista de élite, que trasciende lo deportivo. *(Ver texto: “Sara Khadem: el ajedrez y la vida, sin velo”, de Leontxo García).
Sara Khadem nació en Irán en 1997 y ha sido campeona del mundo sub12, subcampeona sub 16, dos veces subcampeona del mundo (2017 y 2018), así como Gran Maestra de la Federación Internacional (FIDE), entre otros hitos de su impresionante currículum. En el Campeonato del Mundo disputado a finales de 2022 en Kazajistán, la ajedrecista decide jugar sin velo en protesta por la muerte de una activista iraní en Teherán. Una decisión que fue noticia internacional y que le obligó a exiliarse en España, ya que pesaba sobre ella una orden de arresto. Sara Khadem está nominada al Premio Princesa de Asturias de la Concordia y es Premio Clara Campoamor 2023.
En palabras del periodista Leontxo García, Sara Khadem es “una de las personas más fascinantes que me he encontrado en mis 40 años de profesión”. El periodista, que será un año más maestro de ceremonias del torneo, ha añadido que Alcubierre es un caso único en el mundo, ya que, ha dicho “puedo asegurar con el cien por cien de certeza que no conozco otro municipio de unos 400 habitantes como Alcubierre por el que hayan pasado tantos campeones del mundo y grandes ajedrecistas”.
Khadem será la cuarta ajedrecista de postín invitada a Alcubierre. Las otras tres fueron la china Yifán Hou, excampeona del mundo y actual número uno; la húngara Judit Polgar, única mujer en la historia que ha estado entre los diez primeros del escalafón. Y la ucrania Anna Muzychuk, quien comparte su rebeldía con Khadem: en 2017 se negó a disputar el Mundial de rápidas en Arabia Saudí porque la obligaban a hacerlo con velo.
Con la presencia de esta figura internacional, continúa el alto nivel del festival de Alcubierre. En anteriores ediciones han protagonizado el evento, jugadores de la talla de Anatoly Karpov, Boris Spassky, Francisco Vallejo, Veselin Topalov, Ljubomir Ljubojevic, Jam Timman, Miguel Íllescas, Nigel Short, Ruslan Ponomariov, David Antón, Yifan Hou, Anna Muzychuk, Vlastimil Hort y Judit Polgar, el pasado año.
El Torneo de Alcubierre ya es un clásico en la agenda de los amantes del ajedrez y conjuga un circuito de alto nivel con la oportunidad de conocer en persona a figuras internacionales.
El Torneo es valedero para el circuito aragonés y se disputará por sistema suizo a nueve rondas, en la modalidad de partidas de 15 minutos, más 3 segundos por jugada. Participarán, como cada año, en torno a un centenar de ajedrecistas de todas las edades. Está organizado por el Ayuntamiento de Alcubierre, con el patrocinio de la DPH y la colaboración de la Comarca de Los Monegros y la Federación Aragonesa de Ajedrez.
(*) “Sara Khadem: el ajedrez y la vida, sin velo”
Autor texto: Leontxo García, periodista
La valentía y el talento marcan la vida de Sara Khadem, ajedrecista iraní de élite mundial refugiada en España por negarse a jugar con el obligatorio hiyab. Khadem, de 26 años, será (el 22 y 23 de julio) la invitada especial del XVI Torneo de Ajedrez de Alcubierre (Huesca), un pueblo de 400 habitantes por el que ya han pasado cinco campeones del mundo y muchas estrellas del deporte mental.
Aunque Khadem (así le gusta que la llamen, aunque su apellido real es Khademalsharieh; en español se pronuncia Jadem), ya estaba en la élite mundial femenina antes de la pandemia (ahora es la 15ª, a pesar de los muchos problemas que han lastrado su carrera), se hizo famosa el pasado diciembre, cuando se negó a jugar con velo el Mundial de ajedrez rápido en Almaty (Kazajistán). Ese gesto tuvo tanto eco porque ocurrió sólo tres meses después de la muerte en Teherán bajo custodia policial de Mahsa Amini, una iraní de origen kurdo. Esa tragedia originó inauditas manifestaciones de protesta por todo el país, con miles de detenidos, más de una docena de condenados a muerte y al menos cuatro ejecuciones. Que una ajedrecista de élite se rebelase en ese contexto era muy significativo.
De modo que Khadem, junto a su marido, Ardeshir Ahmadi (cineasta, presentador de televisión y empresario; encarcelado tres meses en 2015) y al hijo de ambos, Sam, de diez meses entonces, volaron a España tras ser protegidos por guardaespaldas kazajos durante todo el Mundial y se instalaron en una ciudad sureña cuyo nombre no revelan por motivos de seguridad. Su integración en el país de acogida ha sido rápida y placentera hasta el momento. El presidente Pedro Sánchez la recibió en La Moncloa y le ofreció toda la ayuda que pudiera necesitar.
Pero la vida de Khadem es llamativa desde que era una niña prodigio. A los 8 años ya competía y poco después lo hacía en torneos internacionales. A los 12 era campeona del mundo de su edad, pero su maestra le dijo que el mucho tiempo que dedicaba al ajedrez sería mucho más productivo en matemáticas. La respuesta de Sara fue dejar de ir a la escuela excepto para los exámenes, siempre con el apoyo de sus padres. Y pronto llegaron más éxitos: sobre todos, campeona del mundo sub 16 en la modalidad relámpago (cinco minutos por jugador) en 2013 y subcampeona sub 20 de ajedrez clásico en 2014 con solo 17 años.
A los 19 conoció a Ardeshir, quien ya había sido encarcelado durante tres meses por un reportaje para televisión sobre un grupo de música underground. Se casaron en 2017 y aprovecharon las participaciones de Sara en diversas ediciones del torneo de Gibraltar (el mejor abierto del mundo) para conocer diferentes partes de España, que les gustó mucho desde el principio. A finales de 2018, con 21 años, Sara estaba ya entre las 20 mejores del mundo en ajedrez clásico y era la subcampeona en las modalidades de partidas rápidas y relámpago. Pero sus implicaciones en protestas contra su Gobierno frenaron en seco su carrera deportiva, que ahora quiere retomar desde España.